Manifiesto

En 100architects tenemos la convicción que trabajar en el espacio público es un privilegio.
Es donde nuestros diseños pueden generar el mayor impacto, alcanzando a la mayor cantidad de personas y dando forma a experiencias colectivas significativas.
 
Hemos desarrollado una visión singular: diseñar objetos arquitectónicos que atraigan a las personas y fomenten la interacción social en el espacio urbano.
Nuestros diseños utilizan una estética llamativa y estimulante que capta la atención, despierta la curiosidad y provoca participación espontánea.
 
A diferencia de la arquitectura del paisaje tradicional—que históricamente ha buscado fundirse con su entorno—nosotros apostamos por el contraste y la expresión audaz.
Abordamos cada proyecto desde una perspectiva controvertida e intransigente, aunque siempre con soluciones personalizadas y respetuosas con el contexto.
 
Nuestras intervenciones en el espacio público emplean paletas de colores vibrantes, topografías complejas y formas envolventes que invitan a una relación estrecha con los objetos.
Por su morfología, escala y posicionamiento, nuestros diseños invitan a saltar, sentarse, acostarse, comer, conversar, tomar fotos, subir contenido, reír, descansar y jugar.
 


EL ESPACIO PÚBLICO HIPERESTIMULANTE
 
El espacio público no ha evolucionado significativamente en más de un siglo.
Plazas y espacios urbanos se han vuelto más sofisticados y tecnológicos, pero han fallado en responder a las verdaderas revoluciones culturales y tecnológicas de nuestro tiempo.
 
Hoy en día, plantar algunos árboles, poner bancos y una buena iluminación ya no basta para crear un espacio público memorable.
Las nuevas generaciones son buscadoras de experiencias: priorizan los momentos significativos y memorables por sobre la posesión de objetos. Por otro lado los niños están habituados a entornos sensoriales más intensos y digitales.
 
Los espacios urbanos deben adaptarse a esta nueva realidad, apostando por la estimulación, la fantasía y la interacción.
Creemos que el espacio público debe hacer mucho más que existir: debe emocionar, sorprender y conectar. Y para lograrlo, hay que reinventar la plaza. Hay que colaborar con la tecnología en lugar de competir contra ella, y diseñar espacios que sean más atractivos que una pantalla.
 


NUEVAS DINÁMICAS = NUEVAS OPORTUNIDADES
 
En 100architects no vemos nuestros proyectos como simples soluciones a problemas.
Los entendemos como catalizadores, plataformas para liberar el potencial de un lugar y activar dinámicas sociales y comerciales.
 
Para contribuir verdaderamente a la construcción de ciudad, nuestras intervenciones deben ir más allá de lo visual: deben promover el bienestar, la curiosidad y la alegría. Es por eso decimos que vendemos felicidad.
 
Con el tiempo nos hemos especializado en diseñar experiencias urbanas que generan alegría y entretenimiento a través de la fantasía y la sorpresa—dos detonantes emocionales que estimulan la imaginación en personas de todas las edades.
 
Cuando se crea ese vínculo emocional, nuestros proyectos se convierten en plataformas abiertas para la apropiación comunitaria.
No están hechos solo para ser usados, sino para ser reinventados—muchas veces de formas que ni siquiera imaginamos. Ese es el verdadero objetivo: interacción espontánea, disfrute no planificado y apropiación colectiva del espacio público.
 
En un mundo donde las pantallas, las redes sociales y el comercio online están reemplazando los espacios de encuentro, nuestra misión es traer a las personas de vuelta a la calle, de vuelta a la plaza.
Porque la conexión humana real sigue siendo la base de la felicidad, la innovación y la comunidad.
 


EL ADN DE NUESTROS PROYECTOS
 
Además de las cualidades clásicas del buen espacio público—accesibilidad, caminabilidad, apertura, posibilidad de juego, apropiación y sentido de pertenencia—trabajamos bajo una fórmula propia que define nuestro enfoque:
 
1. CONTRASTE – Nuestros proyectos buscan destacar con fuerza. Son icónicos, coloridos y fácilmente reconocibles.
2. INDEPENDENCIA ESTÉTICA – Diseñamos objetos arquitectónicos autónomos, con formas singulares que no imitan su entorno.
3. POP Y CONTROVERSIAL – Con formas simples y legibles al primer vistazo, nuestros proyectos son pop. Y al irrumpir en paisajes urbanos familiares, se vuelven controvertidos.
4. FUNCIONES INSTANTÁNEAS – Todos nuestros espacios ofrecen usos inmediatos: actividades accesibles y condensadas en un entorno intuitivo.
5. FANTASÍA Y SORPRESA – Creamos narrativas inmersivas que despiertan la creatividad, estimulan la imaginación y generan memorias duraderas.
 


JUGAR NO ES SOLO PARA NIÑOS
 
Nuestras ciudades han sido concebidas con excesiva solemnidad.
Todo está diseñado para ser funcional, eficiente y serio.
Pero no todo tiene que ser tan serio.
 
El concepto de “área de juegos” tradicional—cercada, aislada, solo para niños mientras los adultos esperan afuera—está obsoleto.
En 100architects diseñamos playscapes urbanos: espacios donde la vida urbana y el juego se funden, donde los límites entre lo funcional y lo lúdico se desdibujan.
 
Creemos que todos queremos jugar—sólo necesitamos descubrir cómo.
Niños, adolescentes, padres, abuelos… todos merecemos jugar.
Y la ciudad misma debe convertirse en nuestro terreno de juego. Por eso diseñamos juguetes para la ciudad: objetos urbanos de gran escala que despiertan nuestro instinto lúdico.
 


¿POR QUÉ JUGAR EN LA CIUDAD?
 
Con el juego como núcleo de nuestros proyectos, creamos entornos que no solo entretienen, sino que también educan, reducen el estrés y fomentan la creatividad.
 
El concepto de aprendizaje lúdico se potencia en estos entornos. Reduce la ansiedad, estimula la curiosidad y promueve la participación activa—no sólo en niños, sino en usuarios de todas las edades.
Fomenta la colaboración, el intercambio, la comunicación y el desarrollo cognitivo en un ambiente alegre y relajado.
 
Para nosotros, el color y la forma no son decoración, son herramientas.
Al activar la dopamina y estimular la imaginación, cultivamos entornos donde la creatividad y la conexión emocional florecen.
 


REGENERACIÓN URBANA A TRAVÉS DEL DISEÑO
 
Para 2050, dos tercios de la población mundial vivirá en ciudades.
Con nuestros proyectos, buscamos reforzar el sentido de comunidad, reconectar a las personas con su entorno y inspirar el cuidado de los espacios compartidos.
 
Creemos que regenerar no es construir más, sino desarrollar más potencial.
Se trata de fomentar empatía, impulsar la educación, mejorar la salud urbana y provocar un cambio cultural: pasar de la degradación a la regeneración.
 
Esa es nuestra contribución como arquitectos.
No solo diseñamos espacios, diseñamos posibilidades.
No solo creamos objetos, creamos experiencias.
Porque creemos que un espacio público alegre, social y centrado en las personas es la clave de un futuro urbano más conectado.